Compliance global, ¿por qué falla la gestión de riesgos y qué podemos hacer para mejorarla?

La gestión de riesgos, en términos amplios, es el arte de aprovechar las lecciones del pasado para mitigar las desgracias y explotar las oportunidades futuras; en otras palabras, el arte de evitar repetir errores, reconociendo que la naturaleza siempre puede crear nuevas formas de que las cosas vayan mal. La gestión de riesgos de Compliance no es diferente. Los métodos más comunes tienden a fallar porque se basan en descripciones cualitativas y no tienen en cuenta el sesgo humano ni las relaciones entre diferentes riesgos. Tampoco se ha profundizado lo suficiente en el principal determinante de los riesgos de Compliance: la cultura ética de la organización, sobre todo de la Alta Dirección. Conscientes de que el cálculo de probabilidades en las matrices de riesgo puede fallar, habrá que calibrar bien a los expertos y utilizar modelos probabilísticos, como la Simulación de Montecarlo. El uso de la inteligencia financiera, la priorización de riesgos, la tecnología e innovación son tópicos que se discuten a nivel global para lograr un mayor intercambio de información sobre actividades financieras vinculadas al crimen y al terrorismo. Modernizar las asociaciones público-privadas y facilitar el acceso a información será relevante para las evaluaciones de riesgo futuras. Todo esto, sin perder de vista ni al capital humano que realiza la gestión de riesgos ni a la regulación (por ejemplo, la normativa australiana BEAR - Banking Executive Accountability Regime) que puede ayudar a reducir el determinante antes mencionado, con el objetivo de mejorar la rendición de cuentas y la transparencia.

Por Raúl Saccani

La gestión de riesgos, en particular, se ha convertido en una coreografía delicada entre aprender de los errores pasados y prever los desafíos futuros. No es exagerado decir que el destino de las instituciones financieras, e incluso de las economías, puede depender de la eficacia con la que se manejan estos riesgos. Y sin embargo, como revela el documento proporcionado, hay fallas sistémicas en las estrategias actuales de compliance y gestión de riesgos.

La pregunta persistente es: ¿por qué fallan estos sistemas y qué podemos hacer para mejorarlos? La respuesta se encuentra en una combinación de factores humanos, como los sesgos cognitivos y la cultura organizativa, y en las herramientas y métodos que empleamos para medir y responder al riesgo.

Este artículo busca desenredar estas complejidades y presentar un camino hacia un compliance más efectivo y una gestión de riesgos más robusta. Basándonos en un análisis exhaustivo del documento proporcionado, discutiremos las fallas comunes y cómo pueden ser abordadas mediante la tecnología, la innovación y un entendimiento más profundo de la psicología humana y la cultura corporativa.

Nuestro viaje comenzará con una mirada retrospectiva a los desafíos y las lecciones aprendidas, antes de sumergirnos en las metodologías y sesgos que afectan nuestra capacidad para gestionar riesgos eficazmente. Posteriormente, exploraremos los determinantes de riesgos en compliance, cómo la cultura de una organización influye en la gestión de riesgos y la importancia de la transparencia y la rendición de cuentas.

A través de este análisis, delinearemos estrategias para mejorar, desde el entrenamiento en calibración de expertos hasta el uso de simulaciones avanzadas como la de Montecarlo, y destacaremos la importancia de la innovación tecnológica. También discutiremos cómo las asociaciones público-privadas y la cooperación internacional son fundamentales en la lucha contra los crímenes financieros y cómo pueden mejorar la eficacia de los sistemas de compliance a nivel global.

Además, se examina la regulación australiana BEAR, que responsabiliza a los ejecutivos bancarios de sus acciones y decisiones, promoviendo una gestión de riesgos más proactiva. Se subraya la necesidad de un enfoque basado en valores en el sector, y se apoya la tecnología y la innovación como herramientas cruciales para mejorar la eficacia y eficiencia en la lucha contra los delitos financieros.

En la conclusión, integraremos los hallazgos y recomendaciones del documento y proporcionaremos un llamado a la acción para los profesionales de compliance y la gestión de riesgos. Además, visualizaremos el futuro de la gestión de riesgos y compliance, enfatizando la necesidad de un cambio cultural, la adopción de tecnologías emergentes y una mayor colaboración a nivel internacional.

El capítulo “Compliance global, ¿por qué falla la gestión de riesgos y qué podemos hacer para mejorarla?” es parte de una obra colectiva publicada por la Universidad Externado de Colombia y la Asobancaria, sobre Lavado de Activos, Financiación del Terrorismo y Financiación de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva. Este libro resalta lo que ha sido un trabajo constante en los últimos años para responder a las cambiantes amenazas en esta materia. Para entender esta lucha y su importancia, es imperativo comprender los flagelos a los cuales se expone no solo una entidad, sino toda la sociedad por la ocurrencia de estas conductas.

La obra completa (incluyendo este capítulo) se puede descargar aquí: https://asobancaria.com/ws/biblioteca/LAFTFPADM-Tomo-2.pdf